HISTORIA

Al erigirse la nueva Provincia de Filipinas el 8 de diciembre de 1971, pasaron a ella todos los ministerios históricos que hasta ese momento habían sido de la Provincia, a excepción del Convento de la Santa Cruz de San Juan del Monte (con la Parroquia del Santo Cristo, el Colegio “Aquinas” y el Apostolado del Rosario), la Casa Filial de Ntra. Sra. del Rosario de Binondo (con la Parroquia Personal para los Chinos allí establecida y el Colegio entonces llamado “Crusaders” y hoy “Academia de San Lorenzo Ruiz”), la casa exenta de Santo Domingo de Basco en las Islas Batanes (con cinco parroquias de la Prelatura confiadas a los religiosos de la Provincia: Basco, Mahatao, Ivana, Sabtang e Itbayat) y la casa de vacaciones de Baguio, que fue pronto vendida. La Universidad de Santo Tomás quedó bajo el Maestro de la Orden, confiándose la administración a la Provincia de Filipinas y a la del Rosario.Vicario Fr. Pedro González Tejero. Su nombramiento fue confirmado el 11 de julio de 1978, firmando la aceptación el 16 del mismo mes. Han ocupado este cargo a continuación los PP. Secundino Vicente, Bonifacio G. Solís, Eladio Neira, Laurentino García y Jesús Prol. El título oficial es “Vicariato de Ntra. Sra. del Rosario en Filipinas”. Los Estatutos del Vicariato fueron aprobados en el Consejo Intermedio de Madrid el día 2 de agosto de 1999 y actualizados en el Consejo Intermedio de Ávila el día 15 de abril de 2015.

En 1973, se trasladó la residencia del Provincial a Kowloon Tong, Hong Kong. El Provincial Fr. Bernabé Alonso nombró al Fr. Indalecio Alejo Vicario del Provincial en Filipinas el 16 de enero de 1974. En el Capítulo Provincial de 1977 se ordenó: “reuniendo Filipinas las condiciones indicadas en el n. 389 de las Constituciones, institúyase en dicha región una vicaría provincial con estatuto propio”. Por decreto del Provincial, Fr. Pedro Sansegundo, del 30 de noviembre de 1977, se puso en práctica lo ordenado en el Capitulo, siendo elegido el primer Vicario Fr. Pedro González Tejero. Su nombramiento fue confirmado el 11 de julio de 1978, firmando la aceptación el 16 del mismo mes. Han ocupado este cargo a continuación los PP. Secundino Vicente, Bonifacio G. Solís, Eladio Neira, Laurentino García y Jesús Prol. El título oficial es “Vicariato de Ntra. Sra. del Rosario en Filipinas”. Los Estatutos del Vicariato fueron aprobados en el Consejo Intermedio de Madrid el día 2 de agosto de 1999 y actualizados en el Consejo Intermedio de Ávila el día 15 de abril de 2015.

La casa filial de Ntra. Sra. Del Rosario de Binondo, dependiente del Convento de la Santa Cruz de S. Juan, fue erigida en “domus formata” el 29 de octubre de 1981, y los religiosos asignados a la casa de Santo Domingo de Basco fueron asignados en 1996 “como no residentes” al Convento de la Santa Cruz de S. Juan.

La presencia de la Provincia en las Islas Batanes llegó a su fin en 2001. La casa de Santo Domingo de Basco fue donada a las Hermanas Dominicas Misioneras de Santo Domingo que trabajan allí.

Desde el año 1983 hasta mediados de los 2000 se hicieron esfuerzos para reclutar vocaciones filipinas y de otros países de Asia, pero la experiencia no fue muy positiva. En la actualidad el Convento de la Santa Cruz está abierto a aspirantes de Oriente. Se les ofrece tener una experiencia personal de vida de comunidad y conocer nuestro carisma. Durante este tiempo se dedican a estudiar inglés, lengua en la que se imparten los estudios institucionales. Dadas las muchas posibilidades que ofrece Manila, sobre todo la Universidad de Santo Tomás, el Vicariato colabora con la Provincia recibiendo a hermanos que hacen estudios de post graduados.

El 1 de diciembre de 1971, el Maestro de la Orden, fr. Aniceto Fernández, emitió el documento "Iamab anno 1579" creando la Provincia Dominicana de Filipinas. El mismo Maestro inauguró oficialmente la Provincia el 8 de diciembre de 1971 en la iglesia de Santo Domingo en Quezon City.

La Provincia Madre de Nuestra Señora del Rosario legó los siguientes conventos y casas a la nueva Provincia: Convento de Sto. Domingo, en Quezon City; San Juan de Letrán, en Manila; Ntra. Sra. del Rosario, en Manaoag (Pangasinan); San Raimundo de Peñafort, en la ciudad de Legazpi; Ntra. Sra. del Rosario, en Jaro, IloIlo City (isla de Panay); y la misión en las Islas Babuyan.

La Provincia guardó para sí solo el Convento de la Santa Cruz en San Juan City, Metro Manila, el ministerio de la parroquia personal para la comunidad china en Binondo y la escuela (Lorenzo Ruiz Academy), la misión en las Islas Batanes y la propiedad llamada Dominican Hill en la ciudad de Baguio.

En 1977, los Hermanos de la Provincia que residen en Filipinas solicitaron al Capítulo Provincial que se celebrará en Ávila (España) que eleve su presencia en Filipinas al estado de Vicariato Provincial. Cumplidos todos los requisitos estipulados en nuestras Constituciones, el mencionado Capítulo aprobó la petición (ACP, 1977, n. 389).

El 30 de noviembre de 1977, el Provincial, fr. Pedro Sansegundo OP, emitió el documento, erigiendo el "Vicariato Provincial de Nuestra Señora del Rosario en las Filipinas". El documento decía:

1) El Vicariato Provincial de Nuestra Señora del Rosario se erige en las Filipinas.

2) Todos los hermanos que ministran en las Filipinas y están bajo la jurisdicción de la Provincia son asignados al Vicariato.

3) Los prioratos y las casas bajo la jurisdicción inmediata de la Provincia en Filipinas pertenecen al Vicariato.

El 1 de diciembre de 1977, los hermanos con voz activa fueron llamados para proceder a la elección de un Vicario Provincial. Br. El OP Pedro González Tejero fue confirmado el 11 de julio de 1978. La elección fue aceptada el 16 de julio de 1978 en el Convento de Ntra Sra. Del Rosario de Madrid. El 30 de septiembre de 1978 se instaló el nuevo Vicario Provincial en el Convento de la Santa Cruz, San Juan, Metro Manila

Habiendo reunido todos los requisitos del Ordinario del lugar, así como de la Provincia de Filipinas, el ministerio de Binondo se convirtió en una casa religiosa el 12 de abril de 1982, como se afirma en el documento emitido por el Maestro de la Orden, fr. Vicent de Couesnongle O.P.

En el año 2001, nuestra presencia en las Islas Batanes llegó a su fin. Los superiores informaron al Obispo local y al Nuncio, así como al Provincial de la Provincia Dominicana de Filipinas, ofreciéndoles la posibilidad de hacerse cargo de tales ministerios.

A principios de la década de 1990, la Provincia pidió al Vicariato que acogiera a jóvenes asiáticos que quisieran convertirse en misioneros dominicanos en el espíritu de la Provincia. Aquí conocerían el carisma de la Orden, la manera particular en que la Provincia lleva a cabo el ministerio de la predicación. El Vicariato también les daría la oportunidad de experimentar la vida religiosa en una comunidad internacional y adquirir dominio del inglés como lingua franca en la Provincia. Desde entonces, muchos hermanos de Japón, Corea, Myanmar, Filipinas, Taiwán y Vietnam fueron enviados al Vicariato. Algunos de ellos llegaron a experimentar el modo de vida dominicano; algunos vinieron para estudios institucionales y complementarios.

En los últimos años, se vuelve más claro que el Vicariato está desempeñando una vez más un papel muy importante en la formación preparatoria de jóvenes vocaciones a la Orden. Es una bendición tanto para la Provincia como para el Vicariato cuando los frailes en los Vicariatos siempre están listos y dispuestos a acoger a aspirantes de diferentes países con diferentes culturas, cosmovisiones y antecedentes educativos. Esta apertura y generosidad es el primer signo de una comunidad que vive para dar nueva vida en lugar de aferrarse al pasado.

Mirando más allá de los límites del Vicariato y de la Provincia, vemos que cientos de sacerdotes, seminaristas y religiosas de diferentes países de Asia son enviados por sus obispos o superiores a las Filipinas para estudiar. Es un signo que dice que la semilla de la fe se está fortaleciendo en el suelo filipino; es un signo que recuerda al Vicariato los sueños de los padres fundadores de la Provincia de preparar, educar y enviar misioneros a evangelizar el Lejano Oriente.

Este celo misionero de nuestros padres fundadores de la Provincia, que es un compartir del carisma de predicación de nuestro Padre Santo Domingo, debe vivir y transmitirse a las generaciones venideras.

Características del Vicariato

Las características del Vicariato son las siguientes:

1) El Vicariato se encuentra dentro del territorio de la Provincia Dominicana de Filipinas. Por lo tanto, su expansión está restringida por las normas establecidas en LCO con respecto a este asunto (véase LCO 261.3).

2) Está compuesto por las casas religiosas, Fraternidades dominicanas, asociaciones de fieles, parroquias, escuelas y otras entidades o personas morales con las propiedades adquiridas o adquiridas en el futuro o dirigidas o subvencionadas espiritualmente, intelectualmente o financieramente por la Provincia de Nuestra Señora del Rosario en el territorio de las Filipinas.

3) El Vicariato está estrechamente relacionado con la Provincia de Nuestra Señora del Rosario en el gobierno y mantiene vivo el dinamismo misionero viviendo de manera profética y armoniosa las dimensiones multiculturales y multinacionales de la Provincia. (ver ACGTr.170; ACPA 2013. 78.)

Prioridades del Vicariato

Identificamos seis prioridades en el Vicariato:

1) La evangelización renovada surgió de la unión con Dios y se enraizó en una vida comunitaria fraterna (cf. ACPA 2013. 101);

2) Fiel compromiso de estar al servicio de la Iglesia local (ver ACPA 2013.11);

3) participación activa en el apostolado de los medios;

4) Colaboración diligente con la Provincia en la promoción de vocaciones y en la formación de jóvenes dominicanos;

5) La formación cristiana efectiva de los jóvenes a través de la educación;

6) dedicación inquebrantable al trabajo de justicia y paz.

Convento de la Santa Cruz

La primera iglesia y convento fueron construidos entre 1602-1604, en el solar dado por el Capitán Julián de Cuenca.

En la revuelta de los chinos en 1639 un incendio destruyó la iglesia y convento. Con la restauración llegó la imagen del Santo Cristo a esta iglesia en 1641. Pronto se esparció la devoción a la sagrada imagen, estableciéndose la Hermandad del Santo Cristo, que fue aprobada por el Papa Inocencio X con la Bula Considerantes Nostrae Mortalitatis, fechada el 4 de marzo de 1648.

Otro incendio acabó con la iglesia y el convento durante la invasión inglesa en 1763 y una vez más se reconstruyó en 1774.

En julio 18 de 1880 un violento terremoto dejó inhabitable el inmueble. Acabó su reconstrucción en 1890. La situación política de esta década causó mucha inseguridad y acabó con el levantamiento del pueblo flipino contra España. Durante este tiempo los Padres abandonaron San Juan, llevándose con ellos la imagen del Santo Cristo a Santo Domingo, Intramuros. El 23 de junio de 1914 se abrió de nuevo el santuario. En 1942, la iglesia fue erigida en Parroquia pleno iure.

En 1965 se funda Aquinas School. La Casa fue erigida en Convento en 1969. En 1963 comenzaron los trabajos de ampliación del santuario que acabaron a la par que la construcción del nuevo convento en 1978.